Cristales y Equipos Auxiliares

El fenómeno de la luminiscencia es la base para la creación y desarrollo de métodos de centelleo para la detección de radiaciones ionizantes. Cuando la luminiscencia surge de la acción de la radiación ionizante, se pueden distinguir tres etapas principales: la absorción de la energía de la radiación y la transición del cuerpo a un estado de no equilibrio; la transformación de la energía recibida por el cuerpo, la emisión de luz (o la aparición de otros efectos ópticos) y la transición del cuerpo a un estado de equilibrio. Basados en la luminiscencia (centelleo) se han desarrollado detectores de centelleo con centelleadores sólidos, líquidos y gaseosos. Los centelleadores son sustancias que, bajo la acción de partículas cargadas o radiación electromagnética de onda larga, emiten fotones en la parte visible o ultravioleta del espectro.
Los métodos de detección de radiaciones por centelleo se basan en medir la intensidad de la luz que se produce en las sustancias luminiscentes durante el paso a su través de las radiaciones ionizantes.
El método de centelleo tiene varias ventajas sobre otros métodos:
    - alta eficiencia de registro de radiación;
   - breve tiempo de parpadeo del centelleador. Esto proporciona una alta resolución temporal de los contadores de centelleo o un bajo tiempo muerto. Por lo tanto, es posible medir flujos de radiación intensivos y radionucleidos de vida corta;
   - para varios centelleadores y ciertas radiaciones (α, β, γ) existe una proporcionalidad entre la amplitud del pulso de luz y la energía de la partícula que es conveniente cuando se utilizan contadores de centelleo para la espectrometría de radiación ionizante.